LA UCO
La Guardia Civil del siglo XXI adquiere un protagonismo similar al del siglo XIX. Los bandoleros de hoy no son los de antes, eso sí. Ni los agentes actuales recuerdan a los de antaño. Salvo en sus deficiencias salariales y en sus excelencias de honradez.
La UCO investiga a la UGT. La noticia sembraría el pánico en los anales de la historia. Que la Benemérita persiga al sindicalismo puede ser interpretada, por los propagandistas del régimen psoecialista, como una muestra del ataque a las libertades y a los derechos de la clase obrera. Nada más lejos de la realidad. La Guardia Civil actúa por orden de los jueces y para la defensa de la legalidad de los propios trabajadores.
En el marco de la operación Heracles, la Unidad Central Operativa ha detenido a un dirigente de UGT y a otros dos exdirectivos de Comisiones Obreras. Todos ellos, presuntamente implicados con la colocación de intrusos en los expedientes de regulación de empleo. Los sindicatos de clase no han podido caer más bajo ni los agentes de la Guardia Civil han llegado tan dentro. Tan dentro del propio sistema de corrupción generalizada enfangado por determinados capitostes de la Junta de Andalucía y destacados líderes de los sindicatos hermanos. Todo queda en casa.
En casa. Así se sentía Magdalena Álvarez cuando compareció ante aquel bodrio de comisión parlamentaria instado por Izquierda Unida para sacudirse el polvo del camino del fondo de reptiles. En casa y en familia. Sin más invitado díscolo que la representación del PP. La señora Álvarez ha dejado el vestuario local y juega en campo neutral. La juez Alaya le toma declaración como imputada por el mismo caso que ha llevado a prisión a numerosos compañeros y amigotes de la exministra y exconsejera.
Se está instruyendo en el núcleo de la trama de perversión del Ejecutivo andaluz de Chaves y de Griñán. Según el Auto de Su Señoría, ella "fue la persona que dictó las normas en las que se recogía el concepto presupuestario de las transferencias de financiación a través de la Orden de 4 de junio de 2003". Y ello, porque tanto ella, primero, como Griñán, después, en tanto responsables de Hacienda, tenían el deber de velar por la ejecución del presupuesto y por los derechos económicos de la Hacienda de la comunidad.
En el papel de esclarecimiento de los hechos, la UCO. Funcionarios. Oiga, funcionarios sencillos con un salario mileurista. Funcionarios garantes. Bendita palabra de seguridad jurídica y emocional. Entre ellos, no cabe la administración paralela. Un ejemplo a seguir.
Un saludo.
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