CALIENTE Y NEGRO OTOÑO
No he iniciado las vacaciones y ya los escaparates te recuerdan la cercanía de septiembre. La moda se adelanta al cronos. La situación social, también. El otoño promete calor humano y no térmico. Calor humano negro, oscuro, confuso, turbio. El Plan "E" (de Estadística) nos ha traído obras por doquier y en breve nos deparará una situación crítica. No menos crítica por esperada ni por esperada, menos crítica. En los estertores del franquismo, la prensa se atrevía con titulares como el que hoy se encabeza este artículo. Otoño caliente. Y negro. Tiznado.
Hasta el Gobierno se cura en salud. El mismo Corbacho, que aparenta mostrarse imperturbable, reconoce y avanza que el otoño no será positivo. Lo malo es que se queda tan ancho. Le importa un bledo lo que se avecina. Cara de póker. Al igual que su jefe, el mago de las finanzas, Zapatero. Carita de ángel. ¡Qué digo del Gobierno! ¡Hasta los sindicatos subvencionados admiten la inminencia de tensiones! CC.OO. y UGT pronostican un aumento del paro a muy corto plazo.
A verlas venir. Aquí el que no corre, vuela. Tras la tempestad, viene la calma, repetía Felipe González. La tempestad acabó volteándolo en la dulce derrota de 1996. La calma vino después, cuando la ciudadanía expulsó a un incapaz PSOE del Gobierno de la nación. ZP espera la calma. La calma no llega. Él se inventa treguas y alecciona sobre cómo distraer al pueblo. Maniobras de distracción. En tanto, se alinea con golpistas como el venezolano Chávez. Moratinos alaba el satisfactorio nivel de libertad de expresión en Venezuela cuando las hordas del caudillo arrasan emisoras disidentes. De la Vega se da un garbeo por Brasil y carga, para no perder la costumbre, con el PP. Toda esta crisis es culpa del PP, zanja la vice. Cara de... Cara descomunal, oiga, inmensa la cara de esta señora.
¡Qué equinoccio nos espera! Las noches no sólo serán igual de largas que los días. Es que serán interminables. Zp a lo suyo. ¿y qué es lo suyo? Satisfacer las conjunciones planetarias de Leire Pajín. Cara de piedra. Y digo yo: ¿por qué no se dedican todos ellos, en grupo, a la astrología y ponen un negocio? Si les va mal, que se arruinen ellos. A nosotros que nos dejen como estamos que ya saldremos solitos.
Un saludo.
Hasta el Gobierno se cura en salud. El mismo Corbacho, que aparenta mostrarse imperturbable, reconoce y avanza que el otoño no será positivo. Lo malo es que se queda tan ancho. Le importa un bledo lo que se avecina. Cara de póker. Al igual que su jefe, el mago de las finanzas, Zapatero. Carita de ángel. ¡Qué digo del Gobierno! ¡Hasta los sindicatos subvencionados admiten la inminencia de tensiones! CC.OO. y UGT pronostican un aumento del paro a muy corto plazo.
A verlas venir. Aquí el que no corre, vuela. Tras la tempestad, viene la calma, repetía Felipe González. La tempestad acabó volteándolo en la dulce derrota de 1996. La calma vino después, cuando la ciudadanía expulsó a un incapaz PSOE del Gobierno de la nación. ZP espera la calma. La calma no llega. Él se inventa treguas y alecciona sobre cómo distraer al pueblo. Maniobras de distracción. En tanto, se alinea con golpistas como el venezolano Chávez. Moratinos alaba el satisfactorio nivel de libertad de expresión en Venezuela cuando las hordas del caudillo arrasan emisoras disidentes. De la Vega se da un garbeo por Brasil y carga, para no perder la costumbre, con el PP. Toda esta crisis es culpa del PP, zanja la vice. Cara de... Cara descomunal, oiga, inmensa la cara de esta señora.
¡Qué equinoccio nos espera! Las noches no sólo serán igual de largas que los días. Es que serán interminables. Zp a lo suyo. ¿y qué es lo suyo? Satisfacer las conjunciones planetarias de Leire Pajín. Cara de piedra. Y digo yo: ¿por qué no se dedican todos ellos, en grupo, a la astrología y ponen un negocio? Si les va mal, que se arruinen ellos. A nosotros que nos dejen como estamos que ya saldremos solitos.
Un saludo.
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