LOS DESATINOS DE “EL PAÍS”

-LA CARA DE CEMENTO DE JANLI-

 

  El consejero delegado de PRISA y académico de la Real Academia de la Lengua Española califica de desatino el decreto ley de la TDT que ha elaborado el gobierno amigo, íntimo y generoso amigo, del PSOE. Perro viejo en las lides periodísticas y adelantado de la manipulación informativa, el señor Cebrián, Janli para algunos, nos denuncia la falta de acierto de ZP en el tema de la televisión digital terrestre. Claro que, en honor a este Cervantes de salón del Ritz, habrá que convenir en que él dispara a dar y que al utilizar el vocablo precitado, pretende ser mucho más cáustico.

 El académico de la Lengua ocupa el sillón “V” en el que se han sentado autores de la categoría de Jovellanos, Antonio Machado (aunque nunca tomara posesión del mismo) y el insigne Emilio García Gómez. Tan extraordinario hombre de letras, y de números, y de finanzas, excede el pensamiento del vulgo y cuando escribe su artículo, refiere, además, que la acción del Ejecutivo psoecialista -lástima no siga el dócil Felipe- constituye un disparate, una necedad, una barbaridad, un absurdo e incluso una locura. Y es que el señor Cebrián, criado en las voluminosas mamas de los telediarios del franquismo, y aupado en la neonata democracia preconstitucional a la cima de la influencia política, no puede admitir que le pongan los cuernos periodísticos.

  Que ZP prefiera la amistad de los Roures, Contreras, Barroso y hasta Miliquito, a la suya y a la del fallecido Polanco, es un agravio insoportable. Poner a la “Sexta” por encima de “Cuatro” y relegar a “EL País” en provecho de “Público”, constituye “casus belli”. Cortar las fuentes de financiación de tantos años, con la deuda acumulada por el Grupo, presupone levantar el hacha de guerra. -Voy a darle un toque de aviso, se dijo Janli, antes de que engrase las armas dialécticas de los misiles mediáticos que siempre estuvieron a disposición del PSOE. -Si están con la Sexta, están contra mí.

  Que la memoria de Cebrián es selectiva, no me cabe la menor duda. Canal Plus, Cuatro, Antena 3, son algunos de los favores recibidos por el antiguo presentador de los Informativos del dictador. Los ha olvidado. Quiere más. El insaciable Cebrián quiere más. A los otros, ni agua.

  A Cebrián le importa la democracia lo que a Chávez. Que le beneficia, el pueblo es soberano. Que no, no se puede fomentar los bajos instintos de la masa. Janli, con perdón, donde las dan, las toman. O presiona, comme il faut, a ZP, o Roures se hartará de reir. El fútbol es suyo, Juan Luis, es suyo. Agua y ajo.

Un saludo.